Por Julián Álvarez Sansone
Aún hoy en día, con los enormes avances y cambios ocurridos en nuestra sociedad, cuando se plantea el concepto de familia muchas personas siguen pensando automáticamente en una mamá, un papá e hijos/as. Si bien estas familias existen y son muchas, existe una diversidad de familias que no responden a esta conformación y que permanecen muchas veces invisibilizadas.
Cabe mencionar que en líneas generales, los libros para la primera infancia reflejan casi exclusivamente un único tipo de conformación familiar: familias integradas por parejas heterosexuales con sus hijos/as en común, y se oculta a tantas otras formas de organización familiar que existen en nuestra sociedad. Esto no es una cuestión menor: si mostramos a nuestros/as niños/as un sólo «modelo» de familia, ignorando la variedad de conformaciones familiares, estamos instalando la idea de que se trata de la única posibilidad o al menos de la única «aceptable»; y más aún, estamos sugiriendo que estas familias son de una vez y para siempre. Y es en la niñez que se nos inculcan estos modelos, por lo que resulta necesario difundir otras realidades y mostrar a nuestros/as niños/as desde sus primeros años la diversidad de las familias.
¡Mi Familia es de otro mundo!, de Cecilia Blanco, tiene la virtud de romper con esa concepción y reflejar distintas situaciones y conformaciones familiares, saliendo de lo heteronormativo y mostrando que existen chicos/as con dos mamás o dos papás, con mamás y papás, parejas que se divorcian, mamás que son viudas, familias que deciden adoptar, que deciden llevar adelante una gestación por sustitución o un tratamiento de reproducción humana asistida, siendo esta una pequeña muestra de la gran diversidad que presentan en nuestra sociedad las familias.
Este libro, con sus ilustraciones simples y divertidas, brinda una importante oportunidad para que al interior de todas aquellas familias que lo deseen, se reflexione y dialogue sobre estas historias contadas y protagonizadas por los/as niños/as, quienes a menudo en nuestra sociedad no son escuchados/as cuando se discute «qué es bueno para ellos/as». De allí la importancia de que sean ellos/as quienes protagonizan y cuentan las historias.
Por estos motivos, es posible considerar que ¡Mi familia es de otro mundo! no es un libro simple, sino que es una herramienta fundamental para la inclusión siendo un aporte para terminar con el estigma y la discriminación. Imaginemos que un/a niño/a en una escuela fuera discriminado/a por tener un papá y una mamá; notoriamente es muy difícil imaginarlo porque no es lo que ocurre. Lo que sí puede o podría llegar a ocurrir es la discriminación hacia otros tipos organizaciones familiares, por lo que es importante que se luche y se trabaje para revertir la situación e invitar a la reflexión para prevenir la discriminación, la que muchas veces se basa en el desconocimiento.
Generalmente, se requiere vasta información y distintas formas de concientización y reflexión para desanudar los prejuicios sociales. Ante esto, es sencillo afirmar que este libro resulta una herramienta más para poder dar un paso hacia una sociedad con igualdad real, donde se respeten las circunstancias que atraviesa cada una de las familias, con características puntuales.
El libro de Blanco es una pieza literaria en donde encontramos historias de vida reales, que ocurren a cada momento en nuestra sociedad, pero que no siempre son mostradas a nuestros/as niños/as. Allí encontramos, por ejemplo, «El Mundo de Lu», que tiene a su “papá” y a su “papi”, y donde se narran las actividades que realizan como familia siempre mostrando el amor que une a ellos dos entre sí y con su hija. También se cuenta el caso de una pareja que no puede tener hijos y decide adoptar, o «El Mundo de Leo», en el cual cuenta que su papá falleció cuando él era bebé y se relata la historia de este niño que reconstruye la historia de su padre con cierta emotividad por medio de su mamá. Aparece también un capítulo dedicado a embarazos por reproducción humana asistida, o a familias multiculturales, como en el caso de Vale que —hija de padre argentino y madre china— festeja dos años nuevos. Y como éstas, otras tantas historias y enredos familiares.
En conclusión, esta obra de Blanco permite cristalizar los distintos tipos de familias posibles que hoy en día, en pleno Siglo XXI, se pueden llegar a conformar. Así, este libro es una pieza relevante para entender el núcleo de nuestra sociedad o nuestra comunidad contemporánea, y tiene un valor esencial al tratarse de un libro de literatura infantil, ya que permitiría, por un lado, abrirle la mente a los niños (y también a algunos adultos), y por otro lado, alejarlos de ciertos prejuicios propios del mundo de los adultos.
¡Mi familia es de otro mundo! (2015)
Autora: Cecilia Blanco
Editorial: Uranito
Género: literatura infantil
Complemento circunstancial musical: