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Reseña #794- La herida que la memoria no deja cerrar

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Por Julián Álvarez Sansone

«Recordar para no repetir” es el punto de partida de Esteban Camacho, a partir del cual se propone narrar una historia ficticia que tiene lugar en un contexto histórico atravesado por la tragedia.

En Las Cenizas del Vístula Camacho escribe sobre la vida de Hermann Brietke, un jerarca del campo de concentración de Auschwitz. La historia comienza con la confesión que “Don Hans” (nombre con el que lo conocen sus vecinos) realiza frente al cura de la pequeña localidad bonaerense donde vive hace más de 20 años. Con ese relato, Brietke decide romper su propio pacto de silencio, y contar sobre su verdadera identidad y su pasado, algo que deja perplejo al padre Román D´Angelo, quien sorprendido comienza a conocer la oscura biografía de quien hasta entonces era un simple vecino amable, solidario e introvertido, que colaboraba asiduamente con las distintas actividades que se desarrollaban en la parroquia del pueblo.

En esta novela, el autor construye una historia conmovedora, impactante, cruda e inquietante (aunque por momentos densa y lenta). La narración descriptiva es buena y competente: nos permite vivir la ternura de la relación de amor, el hedor de los campos de concentración, y el perfume de esa mujer que enamora a Hermann. Otra característica positiva de la construcción narrativa de Camacho es el juego temporal que hace el autor entre pasado y futuro.

El relato de Don Hans comienza en su infancia, y recorre los momentos más importantes de su vida, atravesado por los sucesos políticos y bélicos que tuvieron lugar en Europa durante la primera mitad del siglo XX. En ese contexto real, se inserta la historia del entonces joven Brietke, quien participó como soldado en la Primera Guerra Mundial para luego convertirse, en tiempo de la Alemania nazi, en un miembro de las SS (Schutzstaffel, organización militar, policial y de seguridad del Tercer Reich) y posteriormente ocupar un importante rol en Auschwitz, el mayor centro de exterminio de la historia del nazismo. Cabe aclarar que el nombre de la novela hace referencia al Río Vístula, curso de agua a la vera del cual se emplaza el mencionado campo de concentración.

Es importante mencionar que la novela de Camacho no sólo se limita a narrar las circunstancias políticas, sino que también atraviesa una historia de amor, que mitiga en parte los dolores y pesares de la guerra y de esa etapa siniestra de la humanidad. Antes de sumarse al ejército alemán, Hermann conoce a Helena en Berlín, con quien entabla una relación amorosa que se ve interrumpida por la repentina mudanza de la joven, quien junto a su padre vuelve a Cracovia. A partir de allí, y a pesar de la distancia, su amor de la juventud está presente a lo largo de toda la historia.

En esta obra literaria, el amor y el horror se entrecruzan constantemente, planteando un novedoso enfoque de la temática, que cumple el objetivo que el autor se propone en el prólogo: “mantener el recuerdo [del Holocausto], no sólo a modo de homenaje a la memoria de las víctimas de los campos de la muerte, sino para contribuir a evitar que las presentes y futuras generaciones olviden su trascendencia o la minimicen”.

Las cenizas del vístula (2016)
Autor: Esteban Camacho
Editorial: WGT Ediciones
Género: novela

Complemento circunstancial musical:

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