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Reseña #415- La casa de las hojas

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Por Celso Lunghi

Miguel es un argentino de 28 años que está radicado en Costa Rica y que, una noche, recibe un llamado que lo obliga a volver a Buenos Aires: su padre lleva tres meses muerto. Así empieza La casa de la puerta amarilla (Zona Borde, 2017), la segunda novela de Juan Pablo Gómez, cuando su protagonista debe regresar a la ciudad con la que creía haber cortado ya todo vínculo. Miguel es el protagonista absoluto de esta novela no solo porque todos los capítulos están centrados en él sino además porque conocemos la historia a partir de su punto de vista. No estamos un paso adelante del protagonista: nos vamos enterando de la información al mismo tiempo que él. Sin embargo, la novela no se llama Miguel, se llama La casa de la puerta amarilla, y el título, como suele suceder, funciona en calidad de línea directriz y nos indica hacia dónde debemos orientar la lectura, porque el espacio es el otro protagonista de esta novela. O, mejor dicho, el espacio es lo que define y va constituyendo a Miguel a medida que avanza la trama. Miguel es un personaje que construye espacios. Cada una de las cuatro partes de la novela empieza cuando él abandona un espacio y termina cuando conquista otro. El gran tema de la novela, de hecho, es la conquista del espacio: de vuelta al país, Miguel se encuentra con que la casa de sus padres ha sido convertida en un prostíbulo y a lo que asistimos es a sus esfuerzos por recuperarla. Dijimos quién, dijimos dónde, pero no dijimos cuándo. La casa de la puerta amarilla transcurre entre junio y agosto de 1983, una fecha bisagra para la historia argentina: el fin de la dictadura. Y, a pesar de que la historia se filtra por los resquicios, a pesar de que no está puesta en primer plano, uno no puede dejar de preguntarse cuánto de la situación de Miguel no funciona en realidad como cifra de lo que estaba pasando en el país en esos momentos, si en definitiva él está en una situación de completa indefensión y clandestinidad. En este aspecto, la novela es deliberadamente elíptica, pero no es el único. Son muchos los cabos que el lector debe atar y son muchas las conclusiones que la lectura nos demanda. ¿Por qué Miguel se había ido del país? ¿Cuál era la verdadera relación con sus padres? ¿Qué es lo que está dispuesto a hacer por recuperar esa casa? No hay, en este libro, lugar para lectores conformistas.

La casa de la puerta amarilla (2017)

Autor: Juan Pablo Gómez

Editorial: Zona Borde

Género: novela

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