Por Pablo Méndez
1- Cometierra, primera novela de Dolores Reyes, editada por Sigilo, comenzó a hacer ruido mucho antes de su publicación. Los comentarios contribuyeron para que una vez en la calle la novela tuviera una aceptación inmediata. Hoy en día, a poco tiempo de su salida, y gracias a una improbable cantidad de ejemplares vendidos para una editorial independiente, ya está en su tercera impresión y con la atención de otros países por traducirla.
2- En este siglo parido por la crisis económica, la literatura argentina (así como el rock unos años antes) se vio atiborrada de historias donde la pobreza, el barrio, la marginalidad reconvirtieron personajes, escenarios y estructuras. La crisis argentina también modificó la trinchera de manifestación cultural. A veces con cierto éxito, a veces como un fetiche simplista desde el panóptico de la clase media sin privaciones, los libros se acomodaron en los estantes acodándose entre sí con el propósito de alcanzar el podio de la autenticidad social. Cometierra gira en torno a este fenómeno proponiendo un revisionismo del subgénero y otorgándole evidencia de una credibilidad a prueba de modas. En pocas palabras, literatura verdadera.
3- La tierra es algo que no abunda en el epicentro de la civilización, salvo como la base para el ornamento de lo pintoresco. El campo, el conurbano profundo, la periferia terrenal, son la coyuntura desangelada para las historias donde las personas se manchan las zapatillas con barro, las casas pobres tienen piso de tierra, los baldíos son canchas de fútbol o destinos de violaciones o femicidios. En Cometierra, el elemento, el objeto, el detalle, es el arpón en el que las acciones se desenmascaran para volverse naturales, donde lo verosímil entra en estado de pureza absoluta.
4- En la exposición de lo cultural es imprescindible mencionar el arco mítico de la novela. Por supuesto, en estricta relación con el panorama social que la impregna. En el universo que contextualiza el libro que la protagonista coma tierra y que tenga visiones responde a un campo mitológico donde la curandera, la vidente, el mano santa, el pai umbanda son personajes arquetípicos. Creencias que rompe barreras sociales, donde la clase con comodidades busca soluciones en “lo mágico” de la clase baja.
5- La trata de blancas, los femicidios son otro de los puntos relevantes de la novela. Espejos de una sociedad que a través del movimiento feminista evidenció cómo el sistema patriarcal despellejó la figura femenina simbólica y literalmente. No es una temática puesta a la fuerza en una trama, es un signo de época.
6- La ausencia es quizás el punto fuerte donde la constelación de la ficción orbita. Cuerpos y almas que no están. Desapariciones. Un concepto que a pesar de su abanico significativo, en nuestra conciencia colectiva descubre el velo de la atrocidad. Hasta en la maduración de la democracia las desapariciones son tema de Estado, por acción directa o por omisión. En pleno siglo XXI, ya hablamos de desapariciones de género.
7- La utilización de la primera persona no solo crea un lazo más directo con el argumento, también potencia el síntoma reflexivo. A través de una voz que bordea el monólogo, sin evitar la descripción y la acciones, comprendemos los contornos de un personaje que se caracteriza por su unicidad. Una poética construida desde la intimidad.
8- El adentro y el afuera. Ser la que es o la que quiere ser. En esas polaridades el dínamo de la novela hace funcionar la trama. Un sistema dialógico de lo vincular: Cometierra en tensión con su tía, bajo la protección de su hermano Walter, por el recuerdo amoroso de la maestra Ana, ante el deseo por el rati Ezequiel.
9- Hay una construcción de lo popular, como en el cine de Leonardo Favio. Varias escenas de la novela hubiesen recreado secuencias perfectas del cine del fallecido director. Una estética que se funda en la originalidad de una poética visual.
10- Cometierra no debiera ser vista como una novela del momento. El valor inaugural trasciende la novedad Tiene cualidades para permanecer en el futuro lejano como una apuesta de una literatura auténtica, verdaderamente auténtica.
Cometierra (2019)
Autora: Dolores reyes
Editorial: Sigilo
Género: novela
Complemento circunstancial musical: