Por Celeste Scalise
En un mundo donde conviven varios mundos que insisten en negarse mutuamente, aparece Holograma. Un poemario en el que se manifiesta una realidad donde habita la simpleza del ser con su contradicción, con lo que tiene de sutil, y a su vez, con la rudeza que puede caracterizarlo.
Algunos versos se muestran como una suerte de asilimilación pasiva de ese ser total, y en esa sobreabundancia del ser, arribamos, de forma involuntaria, a la nada. Más, vence el ser. Simplemente. Como la lluvia; “Esa lluvia que moja/Mis manos/Mi pelo/Fue parte del cielo/Hace unos instantes.”
Otros versos surgen con ojos de niño, descubriendo la naturaleza y, en ella, a los muchos otros, que se caen, se alimentan, se matan, se reproducen, se esconden y crean.
Y por su parte van los versos del camino, las palabras de la acción. Donde irrumpe la historia, el amor, la muerte, la cotidianeidad, el sexo, la espera, el sueño y la poesía. La vida entrecruzada.
Pero siempre el ser.
Por todo esto, cuando se abre este libro, se entra en un laberinto. Allí, el autor, Andrés F. Ruiz, hace confluir lo cotidiano con lo onírico. Otorgándole belleza a lo que aparece insignificante. Permite el reconocimiento de nuestro mundo interior a partir de la identificación con cualquier cosa del mundo exterior. Hace resurgir la profundidad de lo que parece superfluo. En un remolino de pensamientos donde todo es: la tarde, la abeja, el charco, el dolor, la araña y su presa, el recuerdo, el nombre, el pensamiento, la vejez, el secreto, el arco iris y el sol.
A fin de cuentas, este es un canto al humano, para el humano, con todo lo que lo rodea, incluídos los humanos. “Somos hilos del mismo fuego/Ardiendo muy lejos del sol/ tan cerca del cielo/Brillando como el oro/En la piel del trueno/Somos la alianza de las flores/Los pájaros y reinos/Que vuelan de mano en mano/Arrastrados por el rumor de un sueño.”
Holograma (2015)
Autor: Andrés F. Ruiz
Editorial: Huesos de Jibia
Género: poesía